Ir al contenido principal

Tranquitronco que lo único que has perdido es todo.


Siento como si me fuera a dar un infarto pero solo es el hueco que me anuncia tu ausencia.

Pensé en cortarme las orejas para jamás volver a escuchar esa voz por el teléfono diciéndome que no estás más.

Te veo en marcos por toda la sala de tu madre y desde que llegue he vomitado unas tres veces cosas que ni siquiera recuerdo haber consumido.

Hay tanta gente extraña aquí que casi puedo ver tu ceño fruncido, seguido de algún pretexto para poder salir de ahí, tomaríamos un té en tu cafetería favorita de la calle Homero y reiríamos de todas las conexiones que tenemos.

Las mismas preguntas de siempre van y vienen de diferentes personas "¿Como estas?", "Eran muy cercanos ¿Verdad?" Y sus miradas lastimosas lo reflejan todo y me pregunto si hay tantos intelectuales en el mundo porque no han inventado argumentos más coherentes para momentos como estos.

Estoy entre la volita de "amigos" a los que dejamos de frecuentar después de una situación similar, pero ya no estas aquí para hacerles frente conmigo a sus tontas conclusiones sobre que debería de hacer para "superar esto", 

Me rió para mi, cuando te imagino con tus ocurrentes comentarios sarcásticos que les darías ante tanto derroche de intensa hipocresía lastimera.

Entre tanto me pregunto para que servirán realmente este tipo de cosas, la gente viene y comenta lo joven que eras, lo bien que lo lucias y lo sorpresivo de tu partida, pero ¿que saben ellos sobre ti? creerán en verdad que toda tu existencia cabe en esa pequeña caja ahora puesta encima de aquella marquesina en la sala de tu madre.

Camino hacia tu vieja habitación tratando de no ahogarme con tanto y saco toda esta basura en letras para que no sean lagrimas, pero aun tienes aquella foto que nos tomamos los cuatro durante nuestras primeras vacaciones juntos que putada que lo único que quede de todo aquello sea yo, así que la hago pedacitos así como tu ausencia a mi vida y entonces aquí vienen, desfilan una tras otra por mis mejillas porque ya no hay nadie por quien ser fuerte, hoy solo estoy yo, yo con el peso de la ausencia. ayer él, hoy eres tú y espero que la que ya no este mañana sea yo. 




Comentarios

Entradas populares de este blog

Hi... again?

Hi... It's been a long time since I last wrote to you... And it's not that I forgot about you, or anything like that... It's just that, little by little, I've lost the words to communicate — not just with you... Sometimes I even feel incapable of communicating with myself. It's like constantly living in a state of depersonalization. I don’t know where I’m going, I don’t know what I want, I don’t even know what or who I am. It’s exhausting to feel this way all the time. I feel like I’m never enough, no matter what. I graduated… but what for? For a 9-to-6 job? Is this what I want? But... sometimes I enjoy it. Is "sometimes" enough? When I feel like this, all I can think about is you, and I imagine what we’d be doing now. Maybe you'd be watching my favorite movie over and over without me even asking, or you'd go get my favorite food, or maybe we’d just do nothing. The only thing I’m sure of is that you’d tell me everything’s going to be okay — and som...

La Canción

Escuche esta canción, y volví dos años atrás, Escuche esta canción, y de nuevo fuimos tú y yo, Escuche esta canción, y ahí estabas recostado a mi lado, Escuche esta canción, y en lo único que pude pensar durante los 4:13 min, es en lo segura que me hacías sentir cuando me recostaba en tu pecho, cuando reías conmigo, Porque nadie me ha mirado como tú, nadie me ha sonreído como tú, y si algo debo reconocerte es que nadie, me ha querido como tú. Y se que ahora tal vez ya no lo recuerdes he incluso podrías negarlo, pero tenia que decirte (escribirte aunque nunca vas a leerlo) que aquella niña de 19 años JAMÁS olvidara que: cuando más sola se sintió, descubrió que siempre estuvo contigo.

Hoy también te extraño

Hoy he visto una de esas series a las que soy masoquistamente adicta, no tiene final feliz pero es un pequeño cacho de realidad. Mientras la veía me preguntaba, porque en las grandes historias de amor no terminan juntos, por que existe esta constante de autosabotearnos y perder aquello que se supone tan maravilloso. Después de rondar un rato la pregunta, me alegre muchísimo por primera vez en mucho tiempo, de que tú fueras mi gran amor. Nuestro final aunque trágico, no nos lleva a atormentarnos por haber autosaboteado nuestra mutua felicidad, me alegro tanto de que fueras tú, aun que me entristece de igual manera no poder decírtelo.